Los médicos croatas del hospital KB de Split casi no pueden creer el curioso caso de una de sus pacientes, una adolescente de 13 años, que tras pasar 24 horas en coma debido a una fuerte subida de su temperatura corporal, se despertó hablando sólo en un alemán fluido, un idioma que comenzaba a aprender en el colegio, y habiendo olvidado completamente su idioma nativo.