Acostumbrados al arquetipo, del alienígena gris de ojos enormes y negros, o al ser alto y rubio, cuando ocurren casos que escapan de estas formas, o bien llaman poderosamente la atención de los investigadores o se utilizan para ridiculizar a los testigos por la opinión publica.
El caso de los Palos Verdes, California, ocurrido el 17 de agosto de 1971, integra el reducido catálogo de encuentros con seres extraterrestres, no-humanoides.
Durante esa noche de agosto, Pedro Rodríguez y John Hodges, se retiraban del domicilio de un
amigo, aproximadamente a las 2:00 de la madrugada.
Al subirse al automovil, divisan sobre la carretera, y a escasos dos metros, dos enormes cerebros. Uno tenía un tamaño similar a una pelota de beísbol y el otro, tenía las dimensiones aproximadas al metro sesenta. Ambos estaban cubiertos por la niebla y presentaban un llamativo color azul y poseían unas finas extremidades.
Ambos poseían en el centro una especie de "ojo rojo".
La comunicacióne entre Hodges y este ser fue de manera telepática.
Hodges oyó dentro de su cabeza "Primero traten de entenderse a si mismos, porque dentro de poco, necesitaremos de ustedes". "No recordará este suceso, hasta que volvamos a encontrarnos".
Hodges pisó el acelerador y salió a toda velocidad. Durante el viaje no intercambiaron palabra alguna con su compañero, Rodríguez, que si bien, no había recibido comunicación telepática, habia divisado claramente a los extraños seres.
Luego de dejar a Rodríguez en su casa, Hodges partió a su hogar, encontrándose nuevamente con los dos seres, aguardándolo en la puerta de su casa, y es cuando pierde el conocimiento.
Al despertar, lo que recuerda claramente es encontrarse en una especie de sala de mandos, dentro de una enorme nave espacial, un lugar lleno, de lo que parecían ser sofisticadas computadoras.
Dentro de este recinto, fue acompañado por las dos criaturas hasta una sala donde se encontraban unos seres de unos dos metros y medio de altura, calvos, de piel gris y de boca diminuta.
En ese momento Hodges, entendió que los "cerebros alienígenas" no era mas que seres al servicio de
Sin pronunciar palabra alguna alguna, el ser gris, le mostró a Hodges, una serie de imágenes holográficas, en las cuales podían verse claramente una serie de detonaciones del tipo nuclear.
Mientras se proyectaban esas imagenes, los "cerebros" iban relatando al testigo, indicándole, que si no se detenía con este tipo de prácticas, la humanidad tendría a corto plazo un destino apocalíptico.
Luego de esto, Hodges sintió un fuerte zumbido que lo aturdió, para encontrarse nuevamente en el interior de su automovil, ya sin la presencia de estos particulares seres, los cuales, jamas volvió a ver.
estos seres grises y que eran utilizados para el contacto telepático con seres humanos.
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