¿Qué es Ectoplasma?

En numerosas sesiones organizadas por los médiums rara era aquella en la que faltaba la manifestación fantasmal a través de lo que se denomina ectoplasma. 

Esta sustancia es en principio aquella de la que se forman los fantasmas en sus materializaciones y que dejan como rastro de su paso "real" por nuestro mundo. 

Es una sustancia blanda y viscosa, maleable, desagradable al tacto y que proviene del más allá... Una definición más técnica la tomamos del libro referido de Oscar González Quevedo y en el cual se define el ectoplasma "un fenómeno de condensación de la telergía". 

Podríamos defender el término "telergía" como una fuerza psicofísica exteriorizada-, en el amplio sentido en que consideramos la telergía. En un primer estado de condensación la telergía no pasa de ser un fluido o pequeñísima radiación humana. En tal estado inicial de condensación, sólo es perceptible mediante técnicas y aparatos delicadísimos, siendo capaz de realizar muy poco trabajo. 

El ectoplasma se presenta prácticamente siempre con alguna finalidad: para realizar telekinesias o moldearse en distintas formas (a esto se le llama: ecto-colo-plasmia) de donde vino el sufijo "plasma".

Entonces a la condensación y exteriorización de telergía, más o menos moldeada o moldeable, se llama "ectoplasmia". El ectoplasma puede exteriorizarse en cualquier parte del cuerpo del ectoplasta, al que está vinculado estrechamente. 

Dirigido por la psicobulia, el ectoplasma puede causar telekinesias (desplazamiento de objetos). Ectoplasmia o, concretamente, ectoplasma, deriva del griego "ectos" = fuera y "plasma" = cosa formada o modelada.

El término fue creado por Richet: "Ectoplasma es en principio una masa confusa, más o menos, informe...son estas formaciones difusas a las que llamamos "Ectoplasmas", porque parecen salir del cuerpo... a veces se ven estos ectoplasmas organizándose poco a poco". Ectoplasmia designa el fenómeno; ectoplasma de la sustancia." Hasta aquí ésta más compleja reunión de definiciones de dicha sustancia.

Muestra de Ectoplasma tomada por
grupo de investigacion Hipergea en
1983

Como dato de interés apuntar que fue Schrenck-Notzing el primer investigador-metapsíquico que describió tal sustancia fantasmal. No obstante el Ectoplasma ha sido estudiado por varios laboratorios de reconocido prestigio y se ha descubierto que está compuesto por silicatos, agua y celulosa básicamente, es decir, mucosidad, saliva y papel. 

No se sabe cómo se las han ingeniado algunas médiums para sacar de la boca hasta un kilo de estas sustancias, pero si se sabe que las anteriormente referida pertenecen más a este lado de la vida que al del más allá...

Más sobre el tema

Se denomina "ectoplasma" a la sustancia de color blanquecino y origen y composición desconocidos, que es segregada por un médium en estado de trance o alteración de conciencia.

Es un fenómeno que va unido irremisiblemente a las prácticas espiritistas, ya que las figuras y rostros formados por dicha sustancia pertenecen casi siempre a la representación física de personas fallecidas con anterioridad. 

Posiblemente el caso más sonado a este nivel fue el de la médium Marthe Beraud, quien, estando en estado de trance, materializaba en ectoplasma que brotaba de sus orejas, increíbles figuras planas de un realismo sorprendente.

El ectoplasma, por lo general, desaparece instantes después de finalizar el trance mediúmnico, por lo que resulta imposible analizarlo en laboratorio.

Algo parecido, pero mucho más espectacular por sus características de tamaño y movilidad, es el fenómeno de la fantasmogénesis. En estos casos, las imágenes gestadas por los médiums pueden llegar a ser de cuerpo entero y poder incluso moverse por el recinto en el que se da la experiencia. El caso más célebre de esta fenomenología fue, sin duda, la médium Florence Cook.

Estudiada concienzudamente por el investigador William Crookes, esta mujer lograba en estado de trance materializar el fantasma de Katie King (ver aquí) ; y lo hacía con todo lujo de detalles: el fantasma se presentaba de cuerpo entero y se paseaba por la habitación, en medio de los testigos presentes, sin ningún pudor por ser fotografiada mientras duraba la sesión.

Hubo entonces, con este caso, y habrá siempre con otros, hasta que no puedan ser sometidos a las leyes científicas, una gran polémica con estos dos fenómenos. 

Se ha tachado a sus practicantes y defensores de farsantes y embusteros, pero las fotos están ahí, al igual que los testimonios de prestigiosos investigadores de distintas épocas.

Démosles al menos el beneficio de la duda y el respeto.



Fuente: http://todomiedo.cl/?a=43